El Oficio de Pastor
Cuiden ustedes de las personas que Dios dejó a su cargo, pues ellas pertenecen a Dios. Cuídenlas, como cuida el pastor a sus ovejas. Háganlo con mucho gusto, como Dios quiere, y no por obligación. No lo hagan para ganar dinero, sino con un gran deseo de servir. 1 Pedro 5:3 BLS
La palabra del Señor nos permite ver la analogía que Dios hace con los ministros que pone al cuidado de su pueblo. El compara a sus siervos con pastores, porque sus funciones se parecen entre sí.
El oficio de Pastor no es nuevo, porque vemos que El Padre ejerce este oficio, ya que el salmista le dice Jehová es mi Pastor (Salmo 23:1).
El Hijo también se presenta como un Pastor cuando dice: yo soy el Buen Pastor.. (Juan 10:11). Y El Espíritu Santo también ejerce esta labor, porque dice la escritura: El Espíritu de Jehová los pastoreó… (Isaías 63:14).
Pastor se traduce del vocablo griego Poimen , que se utiliza de un sentido natural , uno que cuida rebaños y no meramente uno que los alimenta.
Se usa metafóricamente de Cristo, y de aquellos que ejercen el pastoreado en la iglesia. Los pastores conducen y apacientan a la grey cuidando de ella. Eso involucra un cuidado tierno y una supervisión llena de atención (Diccionario Vine).
La palabra Pastorear se traduce del vocablo Hebreo Ra’ah y tiene que ver con la manera en que el ganado se alimenta a campo abierto bajo el cuidado de un pastor (Diccionario Vine). Utilizando los dos términos, podemos decir que un pastor tiene la tarea de cuidar y alimentar el rebaño que le encomendaron.
Con lo expuesto anteriormente nos damos cuenta de la importancia que Dios le da a este ministerio. En La
dispensación de la Gracia, Él Espíritu Santo también actúa como Pastor a través de sus ministros, quienes deben cumplir con diferentes funciones.
1. Pastorea a los recién convertidos.
Como pastor pastorea su rebaño: recoge en brazos los corderitos, en el seno los lleva, y trata con
cuidado a las paridas Isaías 40:11 BJ2.
El pastor tiene tareas muy importantes, entre ellas mostrar el amor de Dios y el propio a las personas que acaban de convertirse a Cristo.
Las personas que vienen de andar en tinieblas, a menudo son victimas de problemas graves y por ello se
refugian en los caminos de Dios (Mateo 11:28). Un Buen ministro conoce esta situación y se preocupa por su condición, les presta atención, las cuida, actúa con tacto, con ternura y evitará lastimar a estos nuevos cristianos.
El Señor amonesta severamente a quienes las dispersan, no las cuidan y no se preocupan por ellas (Jeremías
23:2)
2. Pastorea con cuidado a quienes le ayudan en su labor.
Como pastor pastoreará su propio hato. Con su brazo juntará los corderos; y en su seno los llevará.
Conducirá con cuidado a las que están dando de mamar Isaías 40:11 VNM.
Los recién convertidos son los más indefensos espiritualmente, por lo que el pastor delega a otros miembros
para que los cuiden y tengan la capacidad de alimentarlos; La finalidad es que crezcan robustos y fuertes.
Los ayudantes que están dando de mamar la leche espiritual, también necesitan cuidados especiales (1 Corintios 3:2). Ellos deben estar bien alimentados con la palabra y ser tratados con amabilidad, para que ministren amor y no hostilidad. De eso dependerá en parte el desarrollo y la salud de los nuevos miembros (1 Timoteo 1:16 BLS).
3. Pastorea a la congregación.
Tened cuidado de vosotros y de toda la grey, en medio de la cual os ha puesto el Espíritu Santo como
vigilantes para pastorear la Iglesia de Dios, que él se adquirió con la sangre de su propio hijo. Hechos
20:28 BJ3. El Espíritu Santo da la pauta para que el pastor tenga la función de vigilante o supervisor, esta palabra en griego se conoce como episkopos, siendo su significado el siguiente: uno que está encargado de observar las cosas que se hacen y que se hagan correctamente; uno que cura; uno que conserva.
Denota que el Pastor debe observar el desempeño de las personas que están a su cargo, ver si están lastimadas, observarlas periódicamente hasta que las heridas de esta sanen, para que se mantengan firmes en el evangelio.
Regularmente muchas ovejas vienen lastimadas de otras partes y buscan un lugar donde refugiarse de ese dolor, cuando llegan a otra congregación, los pastores deben ver la condición de la persona, si llega lastimada por causa de algo que hizo o si la lastimaron injustamente, evaluar y actuar. Para que esta se acople a su nuevo hogar y pueda ser supervisada y trabajada con las demás personas que están bajo la responsabilidad del Pastor.
4. No ejercen señorío sobre el rebaño.
No sean tiranos con los que están a su cuidado, sino sean ejemplos para el rebaño. 1 Pedro 5:3 NVI
Un tirano es una persona que gobierna sin justicia y a medida de su voluntad. Abusa de su poder, superioridad o fuerza.
La Palabra del Señor nos permite ver que los pastores son sus representantes (Jeremías 3:15) y un buen ministro sabe administrar bien la autoridad que le ha sido delegada, la cual debe ejercer para construir y cimentar la iglesia y no para destruirla (2 Corintios 2:8). Un buen pastor reconoce que es un servidor y no un señor (Juan 10:11).
5. El Pastor sana las heridas.
He visto sus caminos; pero le sanaré, y le pastorearé, y le daré consuelo a él y a su enlutado Isaías
57:18.
La actitud del pastor debe ser como la del buen samaritano, que tiene compasión de las personas que han sido maltratadas, principalmente por aquellos que las han golpeado para robarles, tanto en lo espiritual como en lo material. Para ello necesitan vino y aceite, estos elementos tipifican muchas cosas como: gozo y unción, que ayudará a sanar los golpes que recibió la persona que llega, tanto en otra congregación como en el mundo.
El dar consuelo implica que la persona llega lastimada y necesita ser sanada o restaurada de alguna pena o dolor que traiga en su corazón.
6. Hablan la Palabra de Dios.
Acordaos de vuestros pastores que os hablaron la palabra de Dios; considerad cuál haya sido el
resultado de su conducta, e imitad su fe Hebreos 13:7
El Pastor debe estar nutrido con la Palabra de Dios, procurando poner en práctica lo que enseña para ser ejemplo de los demás, debe evitar ser contaminado con humanismos. Se debe guiar por la Palabra de Dios y no por conceptos humanos, debe buscar soluciones a las cosas que se le presentan basándose en la Biblia.
Cuando un pastor no está lleno de la Palabra fácilmente se inclina por doctrinas erradas, dirigiéndose únicamente por lo que ve, de la forma que le sucedió a Lot, este varón guió a su familia a Sodoma porque se baso en lo que veía y no en promesas Dios como lo hizo Abraham, trayendo consecuencias para él y su familia.
7. Ejercen gobierno en la iglesia local.
Obedeced a vuestros pastores y sujetaos a ellos; porque ellos velan por vuestras almas, como quienes
han de dar cuenta; para que lo hagan con alegría, y no quejándose, porque esto no os es provechoso
Hebreos 13:17 .
El ejercer gobierno implica responsabilidad y diligencia por parte del pastor, pues ellos “velan por las almas” de las personas que están bajo su responsabilidad.
Un pastor que ejerce buen gobierno es aquel que sabe administrar su hogar y a los suyos con amor, que provee el alimento espiritual y material a su debido tiempo.
Sabe y reconoce que la autoridad que le dieron es para la edificación del pueblo y no para enseñorearse de ellos, porque entiende que las almas Cristo las compró y él sólo es un siervo del Señor.
8. Rendirán cuenta a Dios por nuestras almas.
Obedeced a vuestros pastores y sujetaos a ellos; porque ellos velan por vuestras almas, como quienes
han de dar cuenta. Permitidles que lo hagan con alegría y no quejándose, porque eso no sería
provechoso para vosotros Hebreos 13:17 LBA
El ministro deberá responder por cada alma que este bajo su responsabilidad, de la forma en que lo alimentó, lo restauró o como fue su trato con ella, vemos como algunos pastores descuidan la viña que les dan a cuidar (Cantares 1:6) y como otras maltratan a los que están bajo su responsabilidad porque creen que no van a rendir cuentas (Mateo 21:33-35).
Vemos como en el libro del profetas Jeremías Dios le reclama a los pastores que no cumplieron su función de atender como debían a los que estaban a su cargo, sin embargo también vemos como el Señor recompensa a los siervos que trabajaron con diligencia diciéndoles:”buen siervo fiel”.
9. Reconoce la capacidad de las personas a su cargo.
Génesis 33:13 Y Jacob le dijo: Mi señor sabe que los niños son tiernos, y que tengo ovejas y vacas
paridas; y si las fatigan, en un día morirán todas las ovejas.
El pastor sabe cómo tratar a cada uno de los que están bajo su cargo, conoce la capacidad de los que lo ayudan y de los que ministra, no exige de ellos más de lo que pueden dar según su capacidad, su caminar no es acelerado sino al ritmo de las personas más pequeñas, espiritualmente, no las cansa porque sabe que no resistirían el paso que el lleva, a diferencia de Esaú que no le importó la condición de las personas que venían con su hermano.
Así mucho ministro que no tiene misericordia de las personas que están bajo su cuidado, exigen a los de menor capacidad y estatura espiritual que caminen al ritmo que ellos van, como resultado de esto, algunas personas se debilitan y se estancan en su caminar pues los fatigaron.
Conclusión: el Pastor es el encargado de cuidar, dirigir y aplicar amor a las personas que están bajo su cuidado, restaurarlas y atenderlas como si fueran suyas, pero sabiendo que el dueño de estas es el Señor Jesucristo y que pedirá cuentas por cada una de ellas, sea que las trato con amor o que las haya tratado con opresión.
Comentarios