UN AÑO CON PROPÓSITO
“Porque el ocuparse de la carne es muerte, pero el ocuparse del Espíritu es vida y paz”. Romanos 8:6 Estamos iniciando un nuevo año y no es extraño que hagamos planes y tengamos propósitos. Entre los más comunes podemos mencionar algunos ejemplos como bajar de peso, hacer más ejercicio, comer más saludable y muchos más, todos orientados a conservar, preservar y mejorar nuestro cuerpo; otros relacionados con la prosperidad como el estudio, el trabajo y mejorar las condiciones de vida de nuestra familia. Todos son validos y estoy segura, a final de año, hicimos una lista de lo que queríamos este año nos trajera y hasta oramos pidiendo a Dios Bendiciones y el cumplimiento de nuestros anhelos, pero ¿cuantos de nosotros de corazón anhelan que este año sea diferente en su relación con Dios? Personalmente e independientemente de las realizaciones personales que Dios pueda concederme, quisiera que este año sea diferente a los anteriores; conocer más de Dios a través de su espíritu; que mi v